domingo, 14 de febrero de 2010

Religion y TBOs.


Bien es sabido que la narrativa gráfica es bien capaz de ofrecernos un amplio abanico de temas mas allá de la simple historia escapistas. No obstante, hay según que terrenos que algunos pueden considerar muy accidentado para el autor, destacando ante todo el de la religión.
No es fácil encontrar alguna obra dedicada a alguna de las religiones vigentes de nuestra era sin que esta raye en lo propagandístico y subjetivo, haciendo difícil y poco atractivo para el lector laico la adquisición de alguna obra que este dedicada a la plasmar los elementos del canon perteneciente a una religión sin que sienta cierta sensación de incomodidad.
Por ello, me gustaría comentar o recomendar dos obras que demuestran que puede haber cómics que hablen de temas religiosos sin llegar a ser panfletos, Génesis de Robert Crumb y Buda de Ozamu Tezuka.
Génesis es quizás unos de los proyectos mas ambiciosos del autor norteamericano padre del cómic undreground. Utilizando tanto la Biblia como la Torah, Crumb nos relata con su bien reconocible estilo gráfico el primer libro de ambos textos sagrados y los mitos progenitores judeocristianos.
La verdad es de agradecer llegado a ciertos episodios en que se habla nada mas de la genealogia del pueblo de Israel el soporte grafico, dando rostros y personalidad a personajes de los cuales tan solo sabemos el nombre. Tambien entra en juego la crudeza explicita de Crumb en aquellos momentos donde la violencia y la muerte hacen acto de aparición, al igual que la narración sin ningún tipo de censura por lo que refiere a aquellos episodios mas oscuros del pasaje bíblico.
En ningún momento Crumb ve la necesidad de añadir ningún elemento propio al ser esta una obra de síntesis de un estudio detallado por parte del autor cercano a la mitología comparada, el dibujante nos quiere ofrecer la oportunidad de sumergirnos en un Génesis que intenta acercarse lo mejor posible a los mitos orales originales y que realmente lo consigue.
A destacar ante todo la fuerza en que se relata episodios que resultan menos míticos y mas históricos, como por ejemplo la masacre perpetrada por los hermanos de Dina o la ascensión de Jose dentro del Imperio Egipcio. Sentimos el sudor e incluso el hedor de los personajes, que en ningún momento se nos muestran realmente atractivos al lector, sino que son retratados con una naturalidad que les arrebata cualquier posible visión épica, y por ello, Génesis de Rober Crumb is una lectura recomendable para aquellos que siempre quisieron probar suerte con los textos bíblicos básicos y nunca se atrevieron.
Buda, del mangaka Ozamu Texuka, es harina de otro costal, una obra hecha por encargo donde el autor demuestra fidelidad por los textos canónicos no sin introducir de forma constante elementos propios, entre ellos su star system que el buen conocedor del autor conoce de sobras. Comparada con otra obra de cariz espiritual, Fenix, Buda carece de esa densidad constante, llegando a confundir al lector sobre el verdadero tema de la narración, la formación del príncipe Siddhārtha en el Iluminado.
Sin embargo, si se omiten esos elementos alienos al canon o incluso los analizamos, nos hallamos ante otro despliegue de los valores humanistas del autor tan presentes en gran parte de su obra que pueden ser de gran interés para el lector laico o menos interesado en la adquisición de información sobre la figura religiosa.
Tezuka tampoco inventa nada que afecte al canon, ya que nos hallamos (como se ha dicho anteriormente) ante una obra de encargo que obligo al autor a ser lo mas fiel posible, pero que debido a creencias y opiniones personales del mismo se convierte en un vehículo para la fabula moral y el análisis de la naturaleza humana que parecen ampliar parte de aquello que originalmente se tenia que explicar en un principio.
Buda por tanto, es una obra altamente recomendable para aquellas lecturas sobre personajes religiosos no como figuras espirituales sino como personajes dedicados a la labor de elevar la naturaleza humana a un grado mayor, en definitiva, como figuras filosóficas ligadas al humanismo.



sábado, 13 de febrero de 2010

Indy games.



Volviendo a el tono habitual de foro, hoy me gustaría presentar las reseñas de dos juegos de rol que me han llamado especialmente la atención, The day after Ragnarok (Atomic Overmind) y Eclipse Phase (Posthuman studios).

The day after Ragnarok:

A veces nos hallamos que algunos sistemas de reglas universales ofrecen mayor posibilidad para el desarrollo de escenarios, este es el caso de Savage Worlds, un sistema de reglas universal enfocado no al realismo sino a la acción cinematográfica (un ejemplo claro son las diferentes manuales de escenario publicados como ahora Slipstream o Wierd War, los cuales hacen un especial énfasis en el just for the fun sin ninguna pretensión intelectual).
Con cierta popularidad en los círculos independientes de los juegos de rol, son varios los autores y compañías menores que aportan productos bajo licencia a la franquicia, entre ellas Atomic Overmind del diseñador de juegos Kenneth Hite.
The day after Ragnarok es uno de estos productos bajo licencia, donde nos encontramos con una premisa no muy original pero si divertida: ¿que hubiera pasado si ciertos miembros de la SS hubieran invocado al dragón Jomürgand a finales de la segunda guerra mundial?, ¿y si el resultado del Proyecto Manhattan se hubiera utilizado para matarlo en vez de bombardear Japón?. El resultado de tan descabellada idea es el mundo de DaR, un mundo que entremezcla la ciencia ficción pulp con la fantasía de bárbaros y brujos ademas de los entornes post-apocalípticos.
Haciendo especial énfasis en el tono y estética propios de las narraciones de Robert Ervin Howard (por poner un ejemplo, el libro se abre con una introducción propia de la era de Hyboria para poner a los jugadores en situación). Los personajes son principalmente bárbaros de las tierras afectadas por la caída del dragón que intentan sobrevivir y alcanzar la gloria como ya hizo el cimmerio del escritor tejano, las posibles amenazas son una mezcla de horrores atómicos y bestiario mitológico nórdico y los señores oscuros no son otro que ciertos dictadores totalitarios que han sobrevivido a la catástrofe (entre ellos cierto general de origen gallego que ha conseguido crear un pequeño imperio en el norte de África).
No obstante, Kenneth Hite no nos ofrece el típico escenario de campaña donde se mezclan ideas pero luego se ejecutan de forma pobre debido a que el elemento fantástico pesa mas que el realista. A lo largo de la lectura sobre el mundo de DaR nos hallamos con pinceladas y detalles que demuestran que el autor se ha documentado no tan solo sobre los principales actores políticos del periodo sino también sobre los secundarios. Por lo referente a cuestiones como la tecnología del periodo y la cultura es donde quizás se abuse mas de la idea principal y falle más, aunque si que se pueden apreciar referencias que serian de cariz común (un joven Ronald Reagan soberano del principado de California, por ejemplo).
No voy a entrar en detalles sobre la mecánica de juego de Savage World debido a que poco se puede decir de un sistema que es ágil y esta pensado principalmente para la acción mas que para la interpretación de los personajes, y que por lo tanto es perfecto para este escenario recomendable para los grandes aficionados a Conan con un interés hacia el mundo de la Guerra Fría.

Eclipse Phase:

A veces a lo largo de la historia de la industria de los juegos de rol surgen ideas maduras que cuajan en grandes éxitos, ayudando a la evolución del medio. Este es el caso de Eclipse Phase, un juego desarrollado por la compañía independiente Posthuman studios donde se hace especial énfasis en un terreno que tan solo se ha visto en una de las lineas de la franquicia GURPS de Steve Jackson games, el transhumanismo.
Sin llegar a ser un juego de ciencia ficción dura como es en el caso de Transhuman space, Eclipse Phase nos sitúa en un futuro donde el genero, la edad e incluso la anatomía humana son barro perfectamente maleable para la ciencia. Tras un suceso relacionado con el fallo masivo de varias inteligencias artificiales, la sociedad post-escaces a llegado a su fin y una era de paranoia y decadencia se abre ante un genero humano que prácticamente a trascendido la barrera de lo físico.
Primero de todo, el jugador se halla ante un sistema que incentiva sobretodo la posibilidad de cambiar a su personaje del todo, des de un cuerpo capaz de sobrevivir en la superficie de marte hasta un exoesqueleto diseñado para el combate pesado son algunas de las opciones que uno se puede encontrar. El escenario es una verdadera pesadilla distopica donde aquellos que se lo pueden permitir han superado a la muerte y donde el mas desafortunado esta condenado a vivir en un cuerpo sintético en la superficie de un planeta Tierra totalmente exhausto y convertido en un vertedero.
El sistema de reglas funciona a través de la mecánica percentil resuelta con dados de cien, cosa que se agradece en comparación a otros juegos de corte interpretativo donde a veces el sistema puede resultar bastante inexacto a resolver según que cuestiones.
La posibilidades del escenario son muy amplias, des de la simple investigación hasta el conflicto político en un futuro exhausto, pero también nos encontramos con un detallado abanico de referencias no tan solo a elementos propios de la ciencia ficción sino a conceptos derivados de las tendencias relacionadas con el movimiento transhumanista, ofreciendo al juego una densidad que poco títulos hoy en día son capaces de ofrecer, haciéndolo atractivo a aquellos jugadores mas exigentes e interesados en temas mas relacionados con el mundo de nuestro días y sus posibilidades.

Dudas y miedo.


Hoy quiero cambiar momentáneamente el tono del blog y dirigirme a vosotros con un tema que me parece muy presente en la cabeza de todos, la crisis y sus consecuencias.
No hace mucho, dirigiéndome hacia la universidad presencie una escena no muy común en mi municipio, un hombre de unos treinta y pocos, sentando en un banco cercano a las oficinas del Banco Sabadell-Atlantico, el cual llevaba barbas de hace unas semanas, abrigado tan solo con una chaqueta de cuero, camisa y pantalones vaqueros que sostenía con una mano el asidero de un carrito de supermercado lleno de lo que parecían sus pertenencias. Aquella escena me hizo recordar otra similar cuando salia del gimnasio camino a casa, un hombre de similar edad rebuscando en los contenedores mientras arrastraba un carrito de la compra atiborrado de ropas y objetos varios.
Teniendo en cuenta varios factores que se han comentado en diversos artículos periodísticos, mesas redondas e incluso conferencias, no es de extrañar que nos hallemos pronto con este tipo de escenas e incluso que nos encontremos con un incremento de los poblados chabolistas. Nos hallamos en un periodo de incertidumbre que no parece dar señales de remitir pronto y que principalmente afecta tanto a las clases bajas como a la media, poniendo en duda si una vez que todo esto concluya el estado del bienestar que conocimos durante las ultimas décadas en Europa, y concretamente nuestro país, seguirá o sera sustituido por otro modelo social y político con menos miramiento a las clases populares.
Ahora mismo, y aunque suene a introducción forzada, puedo poner como caso la introducción definitiva del plan Bolonia en mi carrera, horarios de clase imposibles para el estudiante que debe de trabajar para pagarse los estudios, la omisión de la segunda convocatoria en Junio y Septiembre (sustituida por una absurda reevaluación) y por supuesto el incremento del volumen de trabajos en detrimento del estudio personal y la adquisición de conocimientos que el plan antiguo favorecía. En resumen, la universidad como posible vía para el reciclaje y la ascensión social de aquellos que decidieron tomar un rumbo no académico al finalizar sus estudios secundarios se esta cerrando debido a un fantasma denominado "mediocridad académica".
Lo que un servidor intenta explicar es que parece que hay un plan progresivo para la eliminación del sistema del bienestar por parte de algunos grupos distantes a la política de centro y que efectivamente están alcanzando sus objetivos y que con esta crisis pueden llegar a alcanzar más.
¿Y por que una eliminación de dicho sistema?, según algunos, es debido al fin del conflicto que le dio luz, según otros, es una manera de evitar el incremento de la clase media y los movimientos migratorios.
Sea el que sea, la cuestión es que el numero de gente que no duerme tranquila incrementa a pasos agigantados al igual que aquellos que se encuentran en el arroyo.
Mr. Fukuyama, ¿realmente hay un fin de la historia?, ¿o es que nos tendremos que tomar con humor el cambio que estamos sufriendo como el hobo de la foto de esta entrada?.

lunes, 8 de febrero de 2010

Futuro pasado.



Hace cosa de unas semanas volví a visionar una película de culto que poco a poco esta desapareciendo en las lagunas de la memoria, Time after Time (1979; basada en la novela de Karl Alexander), protagonizada por Malcolm McDowell.
La cinta, a través de un muy ingeniosos juego de meta ficción, narra la posibilidad de que el escritor H.G.Wells realmente hubiera desarrollada una maquina para poder viajar en el tiempo y en el mismo día en que es presentada por el escritor a sus colegas de la sociedad fabiana es robada por el carnicero de Whitechapel en persona.
El film resulta interesante sobretodo por prescindir del humor fácil surgido por la situación en la que el protagonista se encuentra, no obstante, el Wells de la cinta se muestra bien capaz de comportarse con naturalidad en el mundo futuro, no sin algún percance bien comprensible.
El Jack de David Warner es un antagonista monstruosos y civilizado, cuyo primer encuentro con el personaje de McDowell tras el viaje temporal resulta antologico, no obstante, evocador del Moriarty de ciertos films basados en el personaje de Conan Doyle (por cierto, no quiero estropear algunos sorpresas del film, pero digamos que una de ellas tiene que ver con el detective de ficción).
Lo que resulta llamativo de la cinta es sobretodo la inocencia que presenta Wells, el cual confía que el futuro sera una utopía, y tras realizar el viaje, se encuentra que nada a cambiado de la manera que el preveía. No mas lejos de la verdad, el Wells histórico realmente no era alguien que creyera en la tesis del socialismo fabiano de forma ciega,por poner unos ejemplos, el mismo texto en que se basa tanto la novela como la película, La maquina del tiempo, nos presenta un sombrío y terrible futuro para el genero humano donde todo se reduce a hedonismo o antropofagia. Otro buen ejemplo seria el film en que Wells trabajo y que se podría considerar como una obra propia, La vida futura (The things to come; 1936), donde el futuro utópico llegar tras una edad de oscuridad y barbaridad que se podría considerar una anticipación a los mundos post-apocalípticos tan presentes en la literatura de ciencia ficción de los cincuenta.
Volviendo al film, la persecución de Wells de Jack el destripador es una buena manera de repasar la tendencia a idealizar el futuro bien presente por parte de ciertas obras de ciencia ficción, debido al cariz humanista de las ideologías de ciertos autores del genero a la par que incita a reflexionar sobre un concepto amorfo pero vital para el desarrollo del pensamiento cultural y político como es la utopía (sobre la cual quizás escriba un próximo).
Por ello, si tenéis un momento, intenta localizar la cinta, creo que lo agradeceréis tanto como volver a ver Regreso al futuro.